Os invitamos a descubrir los rincones más espectaculares y mágicos del litoral de Calella de Palafrugell, Llafranc y Tamariu, los tres núcleos costeros del municipio de Palafrugell, antiguos pueblos de pescadores, que todavía conservan su esencia y calidez con sus calles estrechas empedradas, las casas blancas a orillas del mar y unas vistas fantásticas del mar Mediterráneo.

El Jardín Botánico de Cap Roig fue creado por el matrimonio Woevodsky, él arquitecto y ella diseñadora de jardines, en 1927. Su construcción finalizó en 1974, año en que se acabó de construir el castillo. Los jardines están ubicados sobre un acantilado con unas 20 hectáreas de terreno y están distribuidos en diferentes terrazas con excelentes vistas sobre el mar. Podrá ver más de 1000 especies vegetales provenientes de todas las regiones de clima mediterráneo del mundo.

Continuando por el camino de ronda en dirección norte después de dejar atrás los jardines de Cap Roig, encontrará la Playa del Golfet, una pequeña cala a la que sólo se puede acceder a pie desde el camino de ronda. Siguiendo en dirección norte hacia el núcleo de Calella podrá hacer parada para hacer un aperitivo en la terraza del Hotel Sant Roc, desde donde podrá disfrutar de unas vistas panorámicas de Calella de Palafrugell y del mar Mediterráneo que le enamorarán.

Después de esta pausa, podrá continuar descubriendo las pequeñas playas y calas rodeadas de antiguas casitas de pescadores como Port Pelegrí, La Platgeta y la Playa d’en Calau hasta llegar al rincón más conocido y fotografiado de Calella: la Playa de Port Bueno o la Playa de las Barcas. La reconocerá por las bóvedas de los edificios junto a la arena y también porque es la ubicación donde cada primer sábado de julio se celebra La Cantada de Habaneras. Al borde del mar, llegará a la playa más grande de Calella, Playa El Canadell con 100 metros de longitud y 30 metros de ancho.