Cala Foradada en Palamós, conocida por su tranquila belleza y accesibilidad moderada, es una joya escondida en la Costa Brava. Esta pequeña cala, situada cerca de la playa del Castillo en Palamós, se encuentra a tan solo 10 minutos a pie desde el estacionamiento de la playa. Es un lugar perfecto para los que buscan la paz lejos del bullicio turístico, ofreciendo una experiencia única de la naturaleza costera catalana. El acceso no es el más sencillo, lo que ayuda a preservar su encanto virgen; se recomienda llegar temprano para asegurar un buen sitio.

La cala destaca por un espectacular arco de piedra natural, formando un túnel que atraviesa la roca, ofreciendo un paisaje impresionante tanto para los aficionados a la fotografía como para aquellos que disfrutan del snorkel en sus aguas claras. A pesar de su belleza, Cala Foradada no cuenta con servicios, por lo que es recomendable llevar todo lo necesario para pasar el día. Para los aventureros, el acceso más fácil es por mar, con la posibilidad de alquilar un kayak desde la playa del Castillo y explorar este escondite natural por cuenta propia​.